Mi hijo tiene rabietas. Como ayudarle a gestionar sus emociones
Rabietas y gestión de emociones
Las emociones se contagian, sí, observa qué ocurre en un grupo de niños entre 1 y 3 años cuando están jugando y riendo y lo que ocurre cuando algunos de ellos empiezan a llorar o tienen rabietas. Otro ejemplo podría ser, lo que ocurre entre los seguidores de un equipo de fútbol durante el transcurso de un partido.
Igual que contagiamos la tristeza, la ira, así lo hacemos con la alegría, la euforia y el resto de las emociones.
Pero no sólo estamos sujetos al contagio, también podemos aprender a regularlas para no sumergirnos en océanos en los que no queremos bucear.
¿Y cómo se hace eso?, me preguntan muchas personas ¿cómo consigo no perder mis nervios cuando mi hijo no se quiere levantar por las mañanas? ¡Qué difícil resulta regular nuestras propias emociones!
No es raro escuchar, ¡me ponen de los nervios, cuando son las diez de la noche y aún no están dormidos, ya no sé qué hacer!
Como padres y madres, queremos que nuestros hijos “se controlen, no nos hagan sufrir con sus comportamientos, que sean obedientes, que hagan las cosas bien”.
Cuando los niños aún no saben expresar lo que sienten, no tienen las habilidades para expresar lo que piensan o no saben cómo defender lo que quieren, lo manifiestan a través de las rabietas y es importante que así lo hagan. Es interesante que sepas, que detrás de cada rabieta hay una historia.
Es eficaz, entrenar o desarrollar la capacidad de empatizar con nuestros hijos y enseñarles a regular sus emociones, como una forma de cuidarse a sí mismos y de establecer relaciones saludables con los demás.
Para que ellos aprendan, enseñarles con nuestro propio ejemplo, saber moderar nuestras emociones y no engancharnos a sus enfados, es primordial. Esto significa dejarlas fluir sin que nos invadan y tomen el control, lo que nos permitirá, identificar las dificultades y desarrollar alternativas para solucionar la situación.
Aprender a gestionar tus emociones
Ponle nombre a lo que sientes, párate y observa qué pensamientos pasan por tu cabeza, normalmente no suelen ser muy positivos “estoy saturada, me están retando, no soy buen padre”. Y comprueba si son reales o no.
Observa si son pensamientos absolutos, huye de los “todos, nada, nunca, siempre” que tanto nos acompañan, o de los debería, que tanto sufrimiento nos provoca. Intenta modificar estos pensamientos por otros que sean reales, que signifiquen lo mismo y no tengan tanta carga negativa. ¡Sí, sé que es difícil!, pero ¿quién te dijo que era fácil ejercer de madre o padre?.
También te puede ayudar, tomar un tiempo fuera de la situación, o que alguien te sustituya hasta que te hayas calmado. No se ven las cosas iguales desde la distancia o la calma.
Para calmarte, ente otras cosas, puedes hacer ejercicios de respiración profunda, saltar, bailar o darte un baño de agua tibia.
Únete a un grupo de personas que compartan tus inquietudes, aprende de ellas y muéstrales lo que tú también eres capaz de ofrecer.
Podemos crecer, aprender de los errores, afrontar una situación de crisis o hundirnos y eso sí depende de nosotros mismos.
Y ahora, enséñales a tus hijos a regular sus emociones.
¿AFECTA NUESTRO ESTADO DE ÁNIMO A NUESTROS HIJOS? ¿QUÉ PIENSAS?
Nueva edición Escuela de Familias
En estos días de verano en los que desconectamos y recargamos las pilas, quería ofreceros la posibilidad de afrontar el nuevo curso de otra manera, aprendiendo a manejar las situaciones que nos iremos encontrando con herramientas basadas en el respeto, la empatía y la escucha activa.
El próximo mes de octubre tendrá lugar la nueva edición de la Escuela de Familias. En esta ocasión habrá dos talleres distintos: uno dirigido a la infancia y otro a la adolescencia, ambos tendrán lugar cada lunes y cada martes en horario de 17:00 a 19:00 desde la semana del 10 de octubre a la del 19 de diciembre .
Os invito a asistir a la sesión de presentación gratuita que tendrá lugar el lunes 3 de octubre en la sede de AEQUO. En esta sesión explicaré el método de trabajo, los contenidos y resolveré cualquier duda al respecto del funcionamiento de la Escuela. Mi intención es que podáis conocer de primera mano qué os puede ofrecer este espacio de trabajo y cómo puede mejorar la relación con vuestros hijos.
Confirma tu asistencia a la sesión gratuita de presentación en el teléfono 646 98 64 75.
¡Os espero en esta nueva edición!
Escuela de Familias · Infancia
Escuela de Familias · Adolescencia
DÍA MUNDIAL SIN ALCOHOL – 15 de noviembre de 2015
Hoy día 15 de noviembre de 2015, me gustaría felicitar a las personas que han conseguido hacer frente al alcoholismo, a todas aquellas que luchan día a día para no volver a él y a sus familias.
El Trastorno por consumo de alcohol, se caracteriza porque la persona que consume alcohol presenta:
A. Un modelo problemático de consumo de alcohol que provoca un deterioro o malestar clínicamente significativo y que se manifiesta al menos por dos de los hechos siguientes en un plazo de 12 meses:
– Se consume alcohol con frecuencia en cantidades superiores o durante un tiempo más prolongado del previsto.
– Existe un deseo persistente o esfuerzos fracasados de abandonar o controlar el consumo de alcohol.
– Se invierte mucho tiempo en las actividades necesarias para conseguir alcohol, consumirlo o recuperarse de sus efectos.
– Ansias o un poderoso deseo o necesidad de consumir alcohol.
– Consumo recurrente de alcohol que lleva al incumplimiento de los deberes
fundamentales en el trabajo, la escuela o el hogar.
– Consumo continuado de alcohol a pesar de sufrir problemas sociales o interpersonales persistentes o recurrentes, provocados o exacerbados por los efectos del alcohol.
– El consumo de alcohol provoca el abandono o la reducción de importantes actividades sociales, profesionales o de ocio.
– Consumo recurrente de alcohol en situaciones en las que provoca un riesgo físico.
– Se continúa con el consumo de alcohol a pesar de saber que se sufre un problema físico o psicológico persistente o recurrente, probablemente causado o exacerbado por el alcohol.
– Tolerancia, definida por alguno de los siguientes hechos:
* Una necesidad de consumir cantidades cada vez mayores de alcohol para conseguir la intoxicación o el efecto deseado.
* Un efecto notablemente reducido tras el consumo continuado de la misma cantidad de alcohol.
– Abstinencia, manifestada por alguno de los siguientes hechos:
* Presencia del síndrome de abstinencia característico del alcohol.
* Se consume alcohol para aliviar o evitar los síntomas de abstinencia.
El Trastorno por consumo de alcohol tiene consecuencias a nivel físico, psicológico, social y familiar.
– Retrasos y absentismo en el puesto de trabajo, así como empeoramiento del rendimiento laboral.
– Pérdida de memoria, dificultad para atender y concentrarse, deterioro del juicio, pancreatitis, hipertensión, gastritis crónicas, hepatitis , cirrosis hepática,reducción de la líbido, impotencia, menopausia precoz.
– Deterioro de las relaciones personales, familiares y sociales.
– Celotipia, dificultad para conciliar y mantener el sueño, irascibilidad, suceptibilidad, sensación de persecución.
– Accidentes de tráfico, entre otras.
Si te encuentras en esta situación, es importante:
– Pedir ayuda a la familia, profesionales en adicciones y centros especializados.
– Evitar discutir con la persona que se encuentre bajo los efectos del alcohol, apoyarla e intentar buscar soluciones.
– Recordar que existen tratamientos y que muchas personas consiguen superar la adicción.
En el tratamiento del Trastorno por consumo de alcohol, es tan importante el paciente como su familia, ya que ésta es con la que convive y se relaciona, en ella se producen situaciones dolorosas, discusiones, enfados, abandonos, que pueden haber afectado a las relaciones entre los distintos miembros.
Por lo que he comentado anteriormente, hay que apoyar al paciente, ofreciéndole información acerca del consumo problemático del alcohol y sus consecuencias, así como enseñarle estrategias que le permitan afrontar una posible recaída e identificar los pasos previos que le pueden llevar a ella, mejorando su autoconcepto, autoimagen, autoestima, así como entrenarle en la gestión de sus emociones.
Y respecto a la familia, hay que trabajar con ella para que sea una fortaleza para el/la paciente, ofreciéndole un espacio en el que compartir su desasosiego, deseperanza, impotencia, sufrimiento a la vez que mostrarle formas de relación saludables, desde el manejo de emociones, la comunicación asertiva, la escucha activa, la empatía.
Por último, señalar los grupos de autoayuda, en el que personas con la misma problemática se reúnen para compartir las dificultades y logros.
Si te encuentras en esta situación, no dudes en perdir ayuda.
Sólo resuelven sus problemas, aquellos que buscan soluciones.
I Jornadas municipales de prevención «Jovenes y adicciones»
El pasado 28 de abríl de 2015, se celebró en el auditorio de Tomares las primeras jornadas municipales de prevención «JÓVENES Y ADICCIONES» organizadas por el Ayuntamiento de Tomares.
Se realizó una mesa redonda en la que participé abordando el tema «Perfil de personas drogodependientes y sus familias en la práctica clínica». Fue una grata experiencia, en la que jóvenes de 4º de ESO participaron activamente.